La cosecha de papa comenzó en la provincia de Matanzas, enfocada en alcanzar 15 600 toneladas pese a desafíos climáticos y económicos, informó la Agencia Cubana de Noticias.
El proceso se desarrolla en las Unidades Básicas de Producción Cooperativa Gispert (Colón) y El Coronel (Jovellanos), según confirmaron autoridades locales.
Lázaro Bello Rodríguez, subdelegado de Agricultura en el territorio, indicó que cuentan con los sacos necesarios para la recolección, mientras los recursos humanos son gestionados por cada cooperativa.
En Gispert, se esperan 3 000 toneladas, y en total, la provincia trabajará 765 hectáreas, 400 menos que en la campaña anterior.
Bello Rodríguez reconoció que los cortes eléctricos en febrero y marzo afectaron el riego, lo que podría impactar los rendimientos. Aun así, afirmó que “hay que buscar lo que hay debajo de la tierra hasta el último día”.
La producción matancera —destinada a semilla, consumo local (siete libras per cápita en marzo y abril) y envíos a otras provincias— enfrenta obstáculos derivados del bloqueo económico de EE.UU., señalaron fuentes oficiales.
La campaña de la papa se mantiene como una de las prioritarias, dada su relevancia para la población.