Con un plan de producción de cerca de 11 millones de envases de fitofármacos y apifármacos, la Empresa de Farmacias y Ópticas de Santiago de Cuba garantiza aproximadamente el 80% de las variedades del cuadro básico de medicamentos consumidos en el archipiélago.
La entidad se consolida como la segunda productora nacional de este rubro, solo superada por La Habana, enfocada en la investigación, producción y comercialización de medicamentos elaborados a partir de masa verde.
Este año incorporó un nuevo centro de producción a su red existente en los municipios de Songo-La Maya, San Luis, Palma Soriano y Contramaestre.
Yamila Falcón García, especialista de logística y producción de la entidad, detalló: “32 farmacias con dispensarios en los que se asegura la venta de productos especializados según las guías y manuales establecidos para su fabricación, distribución y uso, siendo nuestros productos líderes la muralla tintura al 20%, las cremas y jarabes anticatarrales; al tiempo que incorporamos un laboratorio de plantas medicinales en la Ciudad Héroe”.
Se mantiene un sólido encadenamiento productivo con el Laboratorio Farmacéutico Oriente, perteneciente al Grupo BioCubaFarma. Esta colaboración ha permitido desarrollar tabletas a partir de extractos fluidos de plantas como la caña santa, el anamú, la pasiflora y la caléndula, específicamente de los dos primeros.
“La caña santa es un antihipertensivo muy efectivo”, agregó Falcón García sobre este producto derivado de la cooperación.
Un aspecto destacado es la participación activa de otros organismos e instituciones provinciales, como las universidades de Oriente y de Ciencias Médicas. Estas contribuyen al fomento de la medicina verde mediante modalidades, técnicas y procedimientos preventivos, diagnósticos, terapéuticos y rehabilitadores, reconocidos por su oportunidad para preservar y mejorar la salud pública.