El tren espirituano reinició operaciones el 25 de julio de 2024, con salidas desde Sancti Spíritus a las 7:10 p.m. y llegada a La Habana a las 6:40 a.m. del día siguiente, según informó el ministro de Transporte de Cuba, Eduardo Rodríguez Dávila, en su página de Facebook.
Inicialmente, el servicio funcionó dos veces por semana (jueves y domingo), con retorno los viernes y lunes, pero en diciembre se redujo a una frecuencia semanal por limitaciones de combustible.
Hasta diciembre de 2024, el tren transportó 13 195 pasajeros, cumpliendo el 83.3% de su programación. De 42 viajes planificados, siete fueron cancelados: uno por fallos en la locomotora, dos por eventos climáticos y cuatro por falta de combustible, destacó el funcionario.
Solo 16 de los 70 viajes realizados llegaron a tiempo, principalmente por retrasos en cruces con otros trenes nacionales y problemas en las vías.
Rodríguez Dávila detalló que las demoras también se debieron a “defectos en las vías férreas, fallos de la locomotora en camino y dificultades con el fluido eléctrico en las estaciones”. Los coches, rehabilitados para el servicio, carecen de comunicación entre sí y dependen de la locomotora para energía, lo que provoca oscuridad total si esta se avería.
A partir del 10 de mayo de 2025, se aplicará un itinerario ajustado para mejorar la calidad del servicio, basado en la experiencia de nueve meses y opiniones de la población.
Entre los desafíos para este año destacan: optimizar horarios, garantizar mantenimiento periódico de los coches, mejorar iluminación y asientos, e implementar la venta de pasajes mediante la aplicación Viajando.
El ministro reconoció que el tren, con paradas intermedias no incluidas en otras rutas nacionales, tiene una ocupación “aceptable”, pero requiere incrementarla. Además, se priorizará ofrecer alimentos variados, asequibles y de calidad a bordo, así como cumplir mejor los horarios.
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