La Secretaria del Tesoro de EE.UU., Janet Yellen, indicó recientemente que se espera que el departamento alcance un nuevo límite de deuda a mediados de enero.
En una carta dirigida a los líderes del Congreso, Yellen subrayó la necesidad de tomar medidas contables especiales para evitar una infracción del límite de deuda del país.
A partir del 2 de enero de 2025, se establecerá un nuevo límite basado en el monto total de la deuda pendiente, lo que proporcionará un breve alivio debido a la disminución esperada en 54 mil millones de dólares, gracias al canje previsto de valores en poder de un fondo fiduciario federal.
Sin embargo, se anticipa que este margen adicional se agotará entre el 14 y el 23 de enero, momento en el cual el Tesoro recurrirá a maniobras contables extraordinarias para mantener financiado al gobierno.
Yellen no especificó cuánto tiempo se espera que duren estas medidas y las reservas de efectivo del departamento.
No obstante, economistas de Wall Street, como Alec Phillips, de Goldman Sachs Group Inc., han comenzado a proporcionar estimaciones, sugiriendo que la fecha límite definitiva para la acción sobre el límite de deuda probablemente no será hasta julio o agosto de 2025.
Expertos destacan que la carta de Yellen podría marcar el inicio de una prolongada refriega sobre la política fiscal, a medida que la nueva administración, liderada por Donald Trump, tome el poder.
Según trascendió, el Partido Demócrata suele utilizar la necesidad de la aprobación del Congreso para elevar o suspender el techo de la deuda como palanca en negociaciones más amplias sobre impuestos y gastos.
Estrategas vaticinan un camino más fácil hacia un acuerdo para suspender o levantar el tope, dado al control republicano en ambas cámaras del Congreso.
La semana pasada, el mandatario electo, Donald Trump, no consiguió que se adjuntara una medida sobre el techo de la deuda al último proyecto de ley de gasto federal temporal.
(Con información de Bloomberg Línea)
