Jobabo: La suerte de la ganadería, ¿cara o cruz?

¿Ganadería, leche, carne…? El promedio diario de entrega de leche en Jobabo, al concluir mayo, no superó los dos mil litros, lo que representa alrededor de un tercio de lo que para ese mismo mes se acopiaba antes del 2020. Hablamos de una drástica y progresiva caída, muy difícil de recuperar a corto plazo.

Leche “recortada”: La culpa no es de la vaca (I)

En nueve municipios de Camagüey, los niños se han tenido que acostumbrar a tomar menos leche, o sus padres arreglárselas para buscarla, por otras vías —muchas veces la misma que debía ir a la industria—, y pagarla al precio que aparezca, porque lo que se acopia solo da para entregar medio litro diario o uno solo, cada dos días.

Impagos que cortaron la leche

Una deuda que superó los 150 millones de pesos acopió la Empresa de Productos Lácteos Río Zaza con los produc­tores de leche en la provincia du­rante el último trimestre del 2024. Esta millonaria cadena de im­pagos empresariales se unió a la improductividad y la descapitali­zación de la entidad, lo cual gene­ró un efecto dominó que “cortó” la leche.

En la ubre de los impagos

Centavo a centavo, las deudas de la leche se acumularon en la cadena de los impagos a los productores espirituanos. En octubre aparecieron los primeros pesos. Meses después sumaron millones. El 2024 se despidió con las arcas repletas de débitos, mientras niños, embarazadas y enfermos con dietas médicas padecían la ausencia del líquido, las llegadas tardías, las cortaduras… Sin un quilo en el bolsillo, Escambray desanda trillos, ordeña ubres, abre cajas vacías.