El precio de la diversión

En el ajetreo de la vida moderna, los espacios de recreación infantil deberían ser refugios de alegría y risas, donde los más pequeños pueden explorar, aprender y, simplemente, ser niños. Sin embargo, llegar a algunos de estos sitios deja a muchos padres con un sabor amargo de tristeza y preocupación, en vez de la felicidad imaginada.