El ministro de Finanzas y Precios, Vladimir Regueiro Ale, presentó este miércoles ante el pleno de la Asamblea Nacional del Poder Popular el informe final del Presupuesto del Estado correspondiente a 2024.
La rendición de cuentas ocurrió durante el quinto período ordinario de sesiones de la X Legislatura del parlamento cubano.
Regueiro Ale describió el escenario económico del año como “sumamente complejo”, marcado por el recrudecimiento del bloqueo y una inflación persistente en mercados globales.
Estos factores, según el titular, impactaron negativamente en la economía nacional “que en el periodo no muestra crecimiento”.
Frente a las tensiones presupuestarias, destacó el reforzamiento de principios de prioridad y responsabilidad en el uso de recursos, con énfasis en el control del gasto.
Entre las medidas adoptadas mencionó actualizaciones de precios, fortalecimiento del control fiscal y disciplina tributaria.
El gasto social mantuvo carácter prioritario al absorber el 63% del presupuesto total, con fondos dirigidos a Asistencia Social, Salud Pública y Educación. Pese a ello, se dejó de ejecutar un 5% del gasto presupuestado para políticas sociales.
El déficit fiscal cerró en 79 528 millones de pesos, 67 863 millones por debajo de lo previsto. Este resultado, según el ministro, obedeció a un sobrecumplimiento del 7% en ingresos y una ejecución del gasto inferior al 8% respecto al plan, cumpliéndose así lo estipulado en la Ley 164.
Los gastos corrientes cayeron un 7% debido principalmente al incumplimiento del 13% en financiamientos al sector empresarial, situación que Regueiro vinculó a la crisis electroenergética nacional.
Aunque el déficit de la cuenta capital ascendió a 72 921 millones de pesos, la cuenta corriente mostró un desempeño más favorable que lo planificado con un déficit de 6 607 millones, inferior al de 2023.
“Los ingresos corrientes financiaron el 98% de los gastos corrientes, superando en 13 puntos lo previsto”, resaltó el ministro. El déficit fiscal equivalió al 6,5% del PIB, manteniendo una tendencia de mejora en años recientes.
Los ingresos brutos alcanzaron 391 215 millones de pesos (10% sobre lo planificado), con los tributos como principal fuente de financiamiento (64%).
Las políticas tributarias aplicadas en 2024, junto al crecimiento del sector no estatal y mayor eficiencia recaudatoria, impulsaron estos resultados. Asimismo, las formas de gestión no estatales aportaron 58 258 millones de pesos (143% del plan), representando el 15% de la estructura tributaria.
Debate parlamentario: urgen reformas
Al iniciar el análisis del informe, el diputado Ian Pedro Carbonell Karell advirtió que “hoy nuestra economía enfrenta desafíos extraordinarios que requieren medidas audaces, inmediatas, innovadoras e integrales”.
El miembro de la Comisión Económica enfatizó como prioridad “el mejoramiento de la balanza comercial”, por ser “nuestra principal fuente de generación de divisas”.
Alertó que sin capacidad para generarlas será imposible la recuperación económica.
Carbonell Karell calificó de “imprescindible transformar el régimen actual” cambiario, pues la multiplicidad de tasas y la incertidumbre del mercado informal son “obstáculos para la recuperación económica”. Abogó por un mercado cambiario ordenado y funcional y subrayó: “No podemos gastar más de lo que producimos, ni siquiera en moneda nacional”.
Sobre los controles de precios, sostuvo que generan “escasez, ineficiencia, informalidad y distorsiones de riesgo”, proponiendo en su lugar fomentar competencia y eliminar barreras permisológicas.
En el capítulo de inversión extranjera, el viceministro del Comercio Exterior Carlos Luis Jorge Méndez reconoció inconsistencias en su implementación pese a ser “componente fundamental para el desarrollo”.
Aseguró que trabajan en mejorar el ambiente inversionista sin “vender el país”, priorizando tres elementos: mecanismo de gestión y control, perfeccionamiento cambiario y dolarización parcial.
Sector agropecuario en la mira
Varios diputados centraron sus intervenciones en la agricultura. Noel Rolando Benítez (Remedios) propuso extender el esquema de financiamiento del tabaco a otros renglones para que productores accedan directamente a divisas.
El ministro de Agricultura, Ydael Pérez Brito, admitió la necesidad de mayores rendimientos con mejor atención al productor y control de insumos, enfatizando: “Los recursos los tenemos que adquirir de la propia agricultura”.
Jorge Luis Tapia Fonseca, viceprimer ministro, abordó el incumplimiento de la industria azucarera, atribuyéndolo al déficit de recursos financieros, combustibles e inversiones. Confirmó nuevos esquemas de financiamiento para reactivar el sector.