Pensemos en las tantas veces que enviamos cosas al rincón de los olvidos o a la basura, cuando pudiéramos darles una segunda oportunidad de ser útiles. La Empresa de Recuperación de Materias Primas de Camagüey se ha consolidado como ese espacio en el que devolver vida a lo viejo no solo es un objetivo, sino una prioridad.
Cuenta para ello con una estructura de 23 casas de compra en todos los municipios, excepto en Najasa, donde proyectan abrir la próxima, además de una en Las 80 y otra en Camalote, ambas en Nuevitas. Esto forma parte de una estrategia de desarrollo con vistas a 2030, que prioriza el acercamiento de los servicios de compra y de recuperación a la población y a las entidades del Estado.
El objetivo principal es cumplir con la Ley 1288 del Reciclaje, en la que se indica a todos los organismos del Estado y a su sistema empresarial entregar los desechos de sus producciones, los cuales van destinados a ser reutilizados en programas de alto impacto en sectores estratégicos de la economía nacional.
Sin embargo, en Camagüey no todos cumplen lo legislado. Se producen demoras en las entregas y existen entidades que no hacen el procesamiento de las bajas técnicas o no tienen el depósito de la materia prima para conservarla y por eso la botan.
“Entre las instituciones camagüeyanas que más violan lo establecido en este sentido están Ferrocarriles, Transporte, las tiendas de divisa…”, puntualizó Omar Morales Oliva, director general de la Empresa de Recuperación de Materias Primas en la provincia, quien agregó que en el contrato establecido se precisan números para el aviso de existencia de materia prima “y nosotros vamos a recogerla”.
“Tenemos el transporte esperando por los llamados y, sin embargo, allí prefieren desperdiciarla”, añade.
Para esta peculiar misión de búsqueda y rescate, la Empresa ha modernizado y ampliado su parque vehicular en los distritos y en los municipios. El mismo incluye camiones, tractores, camionetas y hasta triciclos eléctricos.
Alfonso Pérez Espinosa, director de la UEB de Recuperación del municipio de Florida, resaltó la labor de los pioneros, que han entregado cerca de diez toneladas de materia prima, lo que representa un promedio de dos kilogramos por estudiante. También explicó que el plan andaba, al cierre de noviembre, por el 80%, y se espera que el año 2023 sea mejor.
La Empresa lidera varios programas priorizados para la economía del país, a partir de productos que se obtienen del reciclaje, como las tejas infinitas, el papel sanitario, el papel boom nuevo, la bandeja para huevos y, aunque algunos dan pérdidas a la entidad, les son necesarios y se busca compensación con otros.
“Nosotros tenemos dos centrales azucareros y una UEB de Ferrocarriles que constituyen grandes fuentes generadoras. No sucede lo mismo con Comercio y Gastronomía, que incumple su entrega. El resto de los contratos se cumple”, añade.
En este punto bien vale hacer una alerta a Comunales, con muchísimo potencial en el reciclaje sin explotar, más cuando no se trata solo de conciencia, sino que es otro ingreso más para la entidad.
Reciclaje: El valor de lo viejo
Por otra parte, para acercar el rescate de las materias primas provenientes de la ciudadanía, desempeñan un rol protagónico los CDR, el movimiento de Pioneros Recuperadores del Futuro y la compra en consejos populares.
“No todo el mundo puede ir a la casa de compra y, por tanto, se pierden aportes. Pero si llegamos con una pesa al barrio, recuperamos mucho más”, asegura el Director general de la Empresa.
Agregó que hay un segmento de la población que lo percibe como una actividad económica, pero no como una acción consciente de cuidado al medioambiente. “Tenemos la deuda de educar al pueblo para que se entienda la gran ayuda que representa para la economía nacional”, señala.
“De las 43 medidas aprobadas para dinamizar la empresa estatal, en esta industria camagüeyana se aprovecha cada letra. Abrimos recientemente una tienda minorista con producciones que se obtienen gracias al reciclaje: vasos confeccionados con botellas, pomos de plástico, rejas de platina, a partir del encadenamiento con los nuevos actores económicos y trabajadores por cuenta propia”, afirmó Morales.
También, con esa creatividad, que debiera ser regla y no excepción, notaron que una entidad entregó como materia prima piezas de refrigeración en buen estado. Las reclasificaron y, a partir de las nuevas facultades, serán expendidas a la población en el establecimiento comercial del reparto Froilán Quirós.
Lo mismo hacen con las hojas escritas por una sola cara, las cuales ofertan a dos pesos. Estas acciones ya dan frutos: el mes pasado captaron seis millones de pesos, el doble de lo que promediaban antes, cuando incluso cerraron un mes con 300 000 pesos de pérdidas. Con las actuales cifras repartieron utilidades entre 200 y 3 000 pesos.
Por una segunda oportunidad
Andar el combinado, en el que se procesa todo lo que se recupera por las distintas vías, funciona como un ejercicio de autoconciencia. Parece magia lo que consiguen a partir de lo que comúnmente desechamos en nuestras casas o centros de trabajo, esos objetos que terminan agrediendo a la naturaleza, pues tardan años en degradarse los plásticos, los cartones y los vidrios.
En el sitio de procesamiento de plástico los hay de todos los tamaños, colores y formas. Allí se agrupan por tipos y una máquina los prensa. Gerardo Rodríguez Nieto, jefe de la brigada de plástico, explicó que reciben diariamente entre cien y 200 kilogramos de material que deben clasificar, procesar y darle valor, “por ejemplo, el envase de plástico llamado bala se manda para Cienfuegos, donde se muele, y de esa mezcla se obtiene la preforma de un nuevo pomo”.
La nave de vidrio ejemplifica perfectamente lo que se quiere, se necesita y se espera del empresariado cubano. A partir de las nuevas facultades empresariales, allí se procesan miles de botellas, algunas llegadas por la vía de las casas de compra, y otras que adquieren a 4,50 pesos.
Ellos, con trabajos voluntarios, horas, y el sudor de todos, trabajadores y directivos, acuden un día a la semana a apoyar, las procesan y quedan como nuevas. Así las pueden vender en diez pesos a Bebidas y Refrescos o a los nuevos actores económicos. De ese modo, se han convertido en la locomotora de la Empresa.
Luis Morales Millet y su tropa tienen sobre sus hombros el trabajo con los metales no ferrosos: cobre, aluminio, bronce, chatarra electrónica, buena parte de lo que va a la exportación y proporciona al país considerables ingresos.
“Aquí lo separamos, según la calidad y la pureza, y luego lo prensamos. Mientras mejor lo clasificamos, más vale”. En tal sentido, Alexander Aguilar Castillo, director adjunto de esta entidad camagüeyana, explicó que los productos se venden al valor del mercado mundial, y allí llegan 30 centavos en divisa dura por cada peso que se exporta.
“El grupo empresarial cuenta con un mecanismo de financiamiento cerrado que permite que, por cada peso que se exporta en chatarra, las empresas reciban un porciento que es reinvertido en la propia actividad del reciclaje, y ello sin dejar de aportar al presupuesto del Estado”.
Reciclar debería ser palabra de orden en un país como Cuba; sin embargo, la recuperación de materias primas se suele ver como asunto de los pioneros y los CDR. En nuestros hogares no suele haber cultura del reciclaje; y muchas veces echamos a la basura pomos, cartón, botellas… cuya reutilización significaría ahorros millonarios para una economía tercermundista y subdesarrollada que asume las garantías de conquistas sociales a la altura del primer mundo.
(Tomado de Granma)