El presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, pidió este miércoles a los países miembros de la OPEP que se unan para contrarrestar posibles sanciones de Estados Unidos contra Teherán, luego de que el presidente estadounidense Donald Trump afirmara que buscará reducir a cero las exportaciones de crudo iraní.
Las exportaciones petroleras de Irán rondan actualmente 1.5 millones de barriles diarios, de los cuales la mayoría se destinan a China. La eliminación de ese volumen —equivalente al 1.4% del suministro mundial— tendría un impacto significativo en los mercados globales.
Pezeshkian hizo el llamado durante una reunión en Teherán con el secretario general de la OPEP, Haitham Al Ghais, quien visitó Irán esta semana. El país ocupa este año la presidencia rotatoria del grupo. En su cuenta de X, la OPEP publicó imágenes de la visita.
“Creo que si los miembros de la OPEP están unidos y trabajan juntos, Estados Unidos no podría sancionar y presionar a uno de ellos”, dijo Pezeshkian, según medios estatales iraníes.
El martes, Trump reactivó su política de “máxima presión” contra Irán para impedir que desarrolle armas nucleares. Las exportaciones de crudo iraní alcanzaron su nivel más alto desde 2018 bajo el gobierno del expresidente Joe Biden, pese a las sanciones vigentes. Irán está exento de los recortes de producción pactados por la alianza OPEP+.
En un encuentro previo con Al Ghais, el ministro de Petróleo iraní, Mohsen Paknejad, advirtió que las sanciones unilaterales contra productores petroleros “desestabilizarían los mercados energéticos”, reportó la agencia SHANA, vinculada a su cartera.
“Despolitizar el mercado del petróleo es una cuestión vital para la seguridad energética. Imponer sanciones unilaterales contra los principales productores de crudo y presionar a la OPEP desestabilizará los mercados del petróleo y la energía, además de perjudicar a los consumidores de todo el mundo”, afirmó Paknejad.