La inflación en la eurozona mantuvo su tendencia a la baja en marzo, situándose en un 2.2% interanual, según datos publicados este miércoles por Eurostat, la oficina estadística de la Unión Europea.
De acuerdo con Prensa Latina, el retroceso se produce en un contexto de incertidumbre global tras los anuncios de Estados Unidos sobre la imposición de nuevos aranceles.
La cifra de marzo representa una leve disminución frente al 2.3% registrado en febrero, acercándose al objetivo del 2% establecido por el Banco Central Europeo (BCE). Este resultado coincide con las proyecciones de analistas consultados por Bloomberg.
La inflación subyacente, que excluye los volátiles precios de energía y alimentos, también mostró un descenso: se ubicó en 2.4% tras haber caído a 2.6% en febrero, luego de mantenerse en 2.7% durante varios meses.
Eurostat destacó que la desaceleración refleja un ajuste gradual en los costos de servicios y bienes industriales.
Aunque la inflación se acerca a la meta del BCE, persisten riesgos externos. Los aranceles estadounidenses al acero, aluminio y automóviles —que entrarán en vigor próximamente— podrían generar presiones deflacionarias al reducir exportaciones, según analistas del ING.
No obstante, las represalias comerciales de la UE podrían elevar los precios internamente, advierten expertos .
El BCE enfrenta un dilema en su reunión del 17 de abril: mientras algunos funcionarios abogan por recortar tasas (actualmente en 2.5%), otros prefieren una pausa para evaluar el impacto de las políticas comerciales y el gasto militar europeo. Christine Lagarde, presidenta del BCE, subrayó que la incertidumbre sigue siendo “muy elevada”.
Proyecciones y perspectivas:
Goldman Sachs anticipa que la inflación subyacente alcanzará el 2% a finales de 2025, aunque advierte que un arancel general del 25% en EE.UU. podría reducir el PIB de la eurozona en 1.4% .
Asimismo, el BCE prevé un crecimiento del PIB del 0.9% en 2025, revisado a la baja por los riesgos comerciales.
Detalles clave de la desaceleración:
1. Componentes volátiles:
- La energía registró una caída interanual del 0.7% en marzo, tras un aumento del 0.2% en febrero.
- Los alimentos frescos, alcohol y tabaco subieron un 2.9%, dos décimas más que en febrero.
2. Presión en servicios:
- Los servicios, clave para el BCE por su vínculo con salarios y demanda interna, moderaron su alza al 3.4% anual, la cifra más baja desde junio de 2022.
3. Divergencia regional:
- Estonia, Croacia y Eslovaquia lideraron las subidas (4.3%), mientras Francia (0.9%) y Luxemburgo (1.5%) registraron las menores tasas. España se alineó con la media europea (2.2%).
(Generado con IA)