La Estación Territorial de Investigaciones de Granos Sur del Jíbaro, ubicada en el municipio espirituano de La Sierpe, concluyó con éxito la producción de semillas básicas de arroz correspondiente al presente año, trabajo centrado en las variedades IA-Cuba 31, IA-Cuba 47, Selección 1 y Viva 17.
Como resultado de las dos campañas desarrolladas, la institución científica garantizó un volumen superior a los 18 mil 800 kilogramos de semilla de alta calidad. Esta producción tiene como destino fundamental a las provincias centrales del país, donde será multiplicada en unidades especializadas para su posterior generalización entre los productores.
La elección de estas variedades no es casual, sino que responde a sus probadas ventajas agroproductivas. Las variedades de arroz IA-Cuba 31 y 47, Selección 1 y Viva 17, se caracterizan por la resistencia que ofrecen a las principales plagas y enfermedades que atacan al cultivo, su adaptación al clima en las distintas épocas del año y los altos rendimientos agrícolas que se obtienen. De ahí la alta demanda que tienen de los productores tanto del sector convencional como del cooperativo y campesino.
Este proceso se enmarca dentro del Programa de Desarrollo Arrocero que implementa la estación territorial. Dicha estrategia incluye la participación de los productores extensionistas seleccionados en las provincias de Ciego de Ávila, Villa Clara, Matanzas y Sancti Spíritus con una elevada preparación tanto en la política varietal como en la producción de semillas, creando un vínculo esencial entre la investigación y la producción masiva.
La obtención de semilla básica es un eslabón fundamental y de alta responsabilidad técnica dentro de la cadena productiva del arroz, pues de su pureza genética y calidad fitosanitaria dependerán los resultados en las fases comerciales posteriores.
El trabajo de la Estación Sur del Jíbaro contribuye de manera directa a la soberanía alimentaria y a la sustitución de importaciones, al proporcionar al sector productivo nacional semillas de alto potencial genético adaptadas a las condiciones del territorio cubano.
La institución, perteneciente al Instituto de Investigaciones de Granos, mantiene un compromiso constante con la innovación y el desarrollo de tecnologías que permitan incrementar y estabilizar los rendimientos del cereal, base de la alimentación en Cuba.













