El Justo: Finca cubana que modela el futuro del turismo agroecológico comunitario

La Finca Agroecológica El Justo, ubicada en la comunidad de Cabeza de Vaca, en Camagüey, se consolida como un modelo pionero de desarrollo sostenible en Cuba.

Según el periódico Adelante, este proyecto integra de manera sinérgica la producción agrícola, el turismo de experiencias y un profundo compromiso social, posicionándose como un referente en la provincia de Camagüey.

Integrada al programa provincial Fincas Agroecológicas para el Turismo, la finca destaca por su riguroso enfoque ambiental y su significativo aporte al crecimiento económico local, atrayendo un flujo creciente de visitantes tanto nacionales como extranjeros.

Reportes de Radio Cadena Agramonte destacan que El Justo diversifica sus servicios mediante actividades ecoturísticas diseñadas para exhibir la rica biodiversidad de la región, estrategia que potencia su atractivo para mercados internacionales sensibles al turismo responsable.

Con una visión solidaria arraigada, la finca expande sus beneficios sociales de manera tangible. Esto incluye la venta de alimentos producidos localmente a precios subsidiados y el desarrollo de proyectos ganaderos específicos para distribuir leche fresca entre pobladores de comunidades vulnerables, reforzando su vínculo con el entorno.

Iniciativas como El Justo están posicionando a Cuba en el emergente mapa global del turismo rural sostenible, un sector en franco auge que privilegia la autenticidad, la preservación cultural y el impacto positivo en las comunidades.

La isla, tradicionalmente reconocida por sus destinos de sol y playa y su patrimonio cultural, apuesta ahora estratégicamente por experiencias agroecológicas inmersivas. Esta diversificación busca no solo captar nuevos segmentos de viajeros, sino también reducir la marcada estacionalidad que afecta al turismo convencional.

Para economías en desarrollo como la cubana, este modelo integrado representa una fuente potencial de ingresos más estable y resiliente. Además de generar empleos directos e indirectos, promueve activamente la soberanía alimentaria mediante la adopción y demostración de prácticas agrícolas ecológicas y resilientes.

Foto: Adelante.

La finca opera en clara alineación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas, destacándose especialmente en los ámbitos de producción y consumo responsables, fomento del mercado local y protección de los ecosistemas.

El éxito de El Justo encuentra eco en experiencias internacionales consolidadas. Países como Costa Rica, con su ecoturismo de selva, Italia, con su agroturismo en la Toscana, y España, con sus rutas rurales, han demostrado cómo este nicho puede contribuir significativamente al Producto Interno Bruto (PIB) nacional mientras fortalece las identidades culturales locales.

Cuba, dotada de un vasto potencial campesino y políticas públicas que comienzan a priorizar el turismo sostenible, aspira a replicar estos éxitos. El objetivo es atraer de manera más consistente a viajeros europeos y latinoamericanos cada vez más interesados en experiencias auténticas y con propósito.

La Finca Agroecológica El Justo se perfila así como un ejemplo concreto y replicable en otras regiones de la Isla, donde el turismo agroecológico bien gestionado podría convertirse en un pilar fundamental para el desarrollo territorial integral.

Esta apuesta refuerza estratégicamente la imagen de Cuba como un destino turístico multifacético, capaz de combinar de manera única sol, historia, cultura y, ahora, una conexión profunda y regenerativa con la tierra y las comunidades que la habitan.

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