El parque solar fotovoltaico Providencia, situado en el municipio cubano de Holguín, se encuentra operativo y aportando 21.8 megavatios (MW) al Sistema Eléctrico Nacional (SEN) tras culminar su construcción antes del plazo previsto.
Esta infraestructura, desarrollada con tecnología china y ejecutada por la Unión de Construcciones Militares (UCM) No. 2, representa un avance significativo dentro de la estrategia del país para diversificar su matriz energética y disminuir la dependencia de los combustibles fósiles.
Dionis Pérez Figueredo, director del centro de operaciones de la Empresa Eléctrica en Holguín y responsable principal del proyecto, detalló que la instalación consta de 42 588 paneles solares montados sobre pilotes hincados.
Además, incorpora siete inversores de 3 MW cada uno, equipos esenciales para elevar el voltaje y garantizar la entrega de energía estable y de calidad a la red nacional.
“Desde el inicio del montaje, en marzo, hasta la puesta en marcha de los primeros inversores en julio, la obra se ejecutó en tiempo récord gracias a una organización por equipos que permitió avanzar por etapas para optimizar recursos humanos y materiales”, afirmó Pérez Figueredo.
Este enfoque permitió una conclusión acelerada del proyecto.
El proceso constructivo involucró de manera coordinada a más de diez empresas cubanas, encargadas de las labores civiles, eléctricas y tecnológicas necesarias. Durante los picos de actividad, la obra llegó a emplear hasta 700 trabajadores.
En contraste, la plantilla estable requerida para la operación y mantenimiento rutinario del parque será de solo 33 personas. La mayoría de estos puestos fijos serán ocupados por residentes de la comunidad aledaña, generando así empleo local.
Respecto a la inversión, Dionis Pérez precisó: “La inversión total alcanzó los 800 millones de pesos. Bajo la supervisión de especialistas nacionales y extranjeros se garantizaron altos estándares de seguridad y la certificación de calidad en la obra”.
Aprendiendo de experiencias previas en otros proyectos, se implementaron desde el inicio estrictas medidas de seguridad para prevenir robos y proteger los valiosos equipos.
En cuanto al mantenimiento futuro, las tareas principales serán el desbroce periódico del terreno y la limpieza de los paneles solares. Estos últimos cuentan con anclajes especiales diseñados para garantizar su durabilidad y resistencia frente a eventos meteorológicos extremos, como fuertes vientos.
Sobre la preparación del personal operativo, el director del centro de operaciones eléctricas de Holguín añadió: “El equipo operador, conformado en su mayoría por jóvenes de la comunidad, recibió una formación exhaustiva en cursos teóricos y prácticos impartidos por expertos del sector. Además, se está culminando un segundo ciclo de capacitación para asegurar la disponibilidad de personal preparado y comprometido con el funcionamiento del parque”.
Distribuido en un extenso terreno de 720 metros de largo por 380 metros de ancho, el parque solar Providencia no solo incrementa la capacidad de generación de energía limpia en Cuba, sino que también deja una huella social positiva en la región de Holguín, brindando nuevas oportunidades de empleo y desarrollo profesional a sus habitantes.