En un mundo donde las transacciones financieras y la gestión de recursos se realizan cada vez más en entornos digitales, proteger tus datos bancarios y activos económicos se ha convertido en una prioridad ineludible.
Los ciberdelincuentes perfeccionan constantemente sus métodos para robar información sensible, desde cuentas de correo hasta credenciales de acceso a plataformas de banca en línea.
Ya sea a través de phishing, malware o ataques de ingeniería social, las amenazas están a la orden del día, y una sola brecha de seguridad puede traducirse en pérdidas económicas irreparables o en el robo de identidad.
Te ofrecemos consejos prácticos y estrategias actualizadas para blindar tus finanzas personales o empresariales, adaptándote a un panorama digital que exige tanto precaución como conocimiento técnico.
- Utiliza contraseñas fuertes: Crea contraseñas que sean largas y complejas. Evita usar información personal como fechas de nacimiento.
- Monitorea tus cuentas regularmente: Revisa tus estados de cuenta y transacciones con frecuencia para detectar cualquier actividad sospechosa. Si ves algo inusual, contacta a tu banco de inmediato.
- No confíes en correos electrónicos y mensajes sospechosos: No accedas a enlaces ni descargues archivos de correos electrónicos o mensajes de texto que no esperabas. Verifica siempre la autenticidad del remitente.
- Cierra sesión en Transfermóvil adecuadamente: Siempre cierra sesión en la aplicación cuando termines de realizar tus operaciones.
- Mantente informado sobre fraudes comunes: Infórmate a través de cuentas y canales oficiales de difusión.