Las autoridades chinas reforzaron su compromiso de potenciar el consumo doméstico como eje central del crecimiento económico, en medio de presiones globales y una transición hacia motores de desarrollo más sostenibles.
El Informe sobre la Labor del Gobierno 2024, presentado este miércoles ante la Asamblea Popular Nacional (APN), prioriza políticas para “mejorar los niveles de vida e impulsar el gasto de los consumidores”.
El consumo final contribuyó 44.5% al crecimiento económico en 2024, superando a inversiones y exportaciones, según datos oficiales. Este impulso es clave frente al proteccionismo comercial y la disminución de sectores tradicionales como el inmobiliario.
“Expandir la demanda interna contrarresta incertidumbres externas y estabiliza el crecimiento a corto plazo”, afirmó Yang Decai, asesor político y economista de la Universidad de Nanjing, durante las “dos sesiones”.
Para respaldar este objetivo, el gobierno anunció la emisión de bonos especiales del Tesoro por 300 000 millones de yuanes (42 000 millones de dólares), duplicando el programa de recambio de bienes.
Según Xinhua, esta iniciativa generó ventas por 1.3 billones de yuanes en 2024, incluyendo 6.8 millones de vehículos y 56 millones de electrodomésticos. “El plan no es solo económico: mejora la calidad de vida”, destacó el ministro de Comercio, Wang Wentao.
Entre los desafíos, el gobierno identificó la baja capacidad adquisitiva y la oferta limitada de servicios de calidad. Para abordarlo, prometió crear 12 millones de empleos urbanos en 2024, aumentar pensiones básicas y elevar el gasto en educación (6.1%) y seguridad social (5.9%).
“Subir pensiones rurales reducirá la tasa de ahorro y dinamizará el consumo”, sostuvo Lu Ting, economista jefe de Nomura.
El informe también enfatizó el vínculo entre consumo y calidad de vida, promoviendo escenarios innovadores como el turismo de invierno, la economía plateada (enfocada en adultos mayores) y dispositivos con inteligencia artificial. La provincia de Jilin, por ejemplo, generó 100 millones de yuanes en gastos directos mediante cupones de consumo invernales.
En el ámbito global, Yang subrayó que estos estímulos ofrecerán “oportunidades para colaboración tecnológica”, especialmente en energías limpias e IA.