China eliminará los aranceles retaliatorios sobre las importaciones de cierta fibra óptica originaria de Estados Unidos a partir del próximo 10 de noviembre, informó este miércoles el Ministerio de Comercio, en lo que parece ser un nuevo gesto de desescalada tras la reciente cumbre entre los máximos mandatarios de ambas potencias.
La medida, detallada en un comunicado oficial, se enmarca en una serie de acciones emprendidas por Pekín para eliminar o pausar de manera progresiva los gravámenes impuestos a productos estadounidenses.
Este movimiento se produce en un contexto de esfuerzos diplomáticos para aliviar las tensiones comerciales bilaterales, luego de que los líderes de China y Estados Unidos se reunieran en la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC).
Según el expediente, “los aranceles se impusieron en septiembre tras una investigación iniciada en marzo”. La investigación, que condujo a la imposición de los derechos arancelarios, formaba parte de las contramedidas comerciales aplicadas por China en el marco de la disputa comercial con Washington.
La eliminación de este gravamen específico es observada por los analistas como una señal de buena voluntad y un posible primer paso hacia la normalización del comercio de productos tecnológicos entre las dos mayores economías del mundo.
Según la fuente, se espera que esta decisión alivie los costos para los fabricantes chinos en el sector de las telecomunicaciones, que dependen de estos componentes de alta gama.
Las autoridades no especificaron si esta medida será seguida por la remoción de otros aranceles en los próximos días, aunque el anuncio refuerza la percepción de un deshielo gradual en la relación comercial bilateral.













