La siembra de cultivos varios en Guantánamo, correspondiente a la campaña de frío, concluyó en diciembre con un impresionante 101% de cumplimiento. Este logro es especialmente meritorio si se consideran las severas afectaciones que sufrió la agricultura local debido al huracán Oscar, que impactó la región en octubre pasado.
El huracán Oscar dejó un saldo devastador, dañando un total de 17,099 hectáreas (ha) de cultivos en los cuatro municipios más afectados: San Antonio del Sur, Imías, Maisí y Baracoa. A pesar de este contexto adverso, el esfuerzo colectivo de los agricultores y el apoyo de las autoridades lograron que la campaña se desarrollara con éxito.
Según el periódico Venceremos, hasta el cierre de diciembre, se había planificado la siembra de 14,496 ha en el territorio más oriental del país. Sin embargo, se lograron sembrar 14,682 ha, lo que representa casi 200 ha más de lo previsto. Este resultado es un testimonio del compromiso y la resiliencia de los productores guantanameros.
Todos los municipios lograron superar sus programas de siembra, excepto Baracoa y Yateras, destacándose Niceto Pérez y Guantánamo con los mejores resultados, alcanzando el 132% y 126% de cumplimiento, respectivamente. Céspedes Lobaina, subdelegado de la Agricultura en la provincia, destacó especialmente el desempeño de Imías, que ejecutó su plan al 118%, a pesar de haber sido uno de los municipios más golpeados por el huracán. Esto se debió a la estrategia de priorizar la plantación de cultivos de ciclo corto.
Sin embargo, Baracoa y Yateras enfrentaron serias dificultades para cumplir con sus metas. Las persistentes lluvias antes, durante y después del huracán obstaculizaron la preparación del terreno, lo que impidió, en ocasiones, la siembra de las áreas que ya estaban listas.
En términos de cultivos, los resultados fueron variados. Los mayores logros se registraron en la siembra de plátano, con 2,639 ha sembradas, lo que equivale a un cumplimiento del 171%. El boniato también tuvo buenos resultados, alcanzando 1,478 ha, lo que representa el 117% de lo planificado. No obstante, cultivos como la yuca y el frijol quedaron por debajo de lo previsto, lo que indica áreas de mejora para futuras campañas.
Un área que ha mostrado una notable recuperación de los daños ocasionados por el huracán es el Valle de Caujerí, en San Antonio del Sur, considerado el principal polo productivo de Guantánamo. Este valle concluyó diciembre con 2,111 ha plantadas, gracias al esfuerzo constante de sus productores y al apoyo recibido de la provincia de Granma en la preparación de tierras.
Dentro del contexto agrícola cubano, la campaña de frío es la más significativa, no solo por el volumen de áreas involucradas, sino también por la diversidad de cultivos que se producen, destacándose las hortalizas.
Con el cumplimiento del plan preliminar hasta diciembre, ahora se espera redoblar los esfuerzos para garantizar que, al cierre de febrero —fecha en que concluye la campaña—, se logren las siembras previstas y, si es posible, se supere esta meta. Este objetivo es crucial para mantener la seguridad alimentaria y contribuir al desarrollo sostenible de la agricultura en la región.