Caficultores de Artemisa iniciaron la campaña de siembra 2025 en terrenos cercanos a las Ruinas del Cafetal Angerona, Monumento Nacional, en un proyecto cooperado entre la Procesadora de Café Luis Bocourt y la Empresa Flora y Fauna.
La iniciativa busca revitalizar este símbolo patrimonial mientras fortalece la producción cafetalera, históricamente arraigada en la identidad cubana. “Nuestro café está indisolublemente ligado a la historia y las tradiciones del pueblo”, destacaron autoridades durante el acto inaugural.
La meta para esta campaña incluye sembrar 48 hectáreas nuevas y resembrar 392 en municipios de Artemisa (Bahía Honda, San Cristóbal, Candelaria y Artemisa) y Pinar del Río (La Palma y Viñales).
Carlos Espinosa Piedra, director general de la Procesadora de Café Luis Bocourt, confirmó la disponibilidad de recursos y resaltó el papel de la brigada femenina “Las Marianas” de Rancho Canelo: “han dado muestras de entrega y sacrificio en cada tarea y fueron decisivas en la preparación del terreno para sembrar las primeras plantas en Angerona”.

El evento, que contó con presentaciones artísticas de estudiantes de la Escuela Vocacional de Arte, sirvió como espacio de capacitación. El ingeniero Luis Marrero Suárez realizó una siembra demostrativa, mientras productores intercambiaron técnicas para optimizar el desarrollo del cultivo.
Yoinel Vidal Matos, director de Flora y Fauna —entidad custodio del sitio—, reafirmó el compromiso con rescatar el legado cafetalero. Espinosa Piedra enfatizó la doble proyección del proyecto: “la intención de fomentar aquí no solo la producción cafetalera sino también el turismo, aprovechando los valores históricos de este lugar”.
El plan inicial en Angerona es tangible: “El propósito de este año es sembrar una hectárea de café en esta zona e ir recuperando paulatinamente cuanto podamos pues esta tierra es buena y cumple con lo necesario para desarrollar el cultivo del café, un rubro exportable que mucho puede ayudar al desarrollo del país”
La estrategia integra sostenibilidad agrícola y conservación patrimonial. Espinosa precisó: “La idea es devolverle a este lugar su esplendor, siempre trabajando de conjunto con Patrimonio y con Flora y Fauna”. El proyecto aspira a convertir Angerona en un polo productivo y turístico, reviviendo el esplendor de uno de los cafetales más emblemáticos de Cuba.