Los ingresos en divisas obtenidos durante 2025, derivados de la actualización de las políticas para la comercialización de vehículos en Cuba, han sido destinados parcialmente al Fondo de Desarrollo del Transporte Público y han facilitado la compra de insumos y piezas críticas para el sector, según informaron autoridades del gobierno.
En un comunicado publicado en su cuenta de Facebook, el ministro de Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila, especificó que los recursos adquiridos incluyen neumáticos, baterías, repuestos mecánicos, lubricantes y componentes especializados para el grupo electrógeno del túnel de la bahía de La Habana, infraestructura vital para la conectividad de la capital.
Destacó que el fondo, activo desde el 1 de enero de 2025, se nutre de impuestos en divisas aplicados a transacciones de automóviles, una medida diseñada para fortalecer las arcas estatales en medio de desafíos económicos.
El ministro aclaró que, aunque estas compras representan un avance, su escala aún es limitada y no satisface la demanda total requerida para la reactivación del transporte en la isla. “Estas son las primeras adquisiciones, con montos modestos. El proceso será progresivo y se incrementará en función de las capacidades financieras”, explicó.
Además, subrayó que la prioridad es garantizar la distribución equitativa de recursos en un contexto de escasez crónica de insumos.
Rodríguez Dávila también detalló avances en proyectos paralelos, como el pago de 150 triciclos eléctricos, parte de un programa para expandir este medio de transporte ecológico a todas las provincias antes de finalizar el año. “Además de esas necesidades básicas, se ha venido avanzando en los procesos de pago de 150 triciclos eléctricos, con el propósito de continuar extendiendo este programa a todas las provincias del país antes de que termine el año”, afirmó.
Entre otras iniciativas, mencionó la gestión para adquirir materias primas destinadas a fabricar placas vehiculares, la importación de 10 000 bicicletas, 50 carros fúnebres, 50 ecomóviles (vehículos de carga adaptados) y neumáticos para transporte en zonas montañosas y empresas provinciales.
Asimismo, señaló que se busca cofinanciar proyectos adicionales, aunque advirtió sobre los altos costos: “Para algunos de estos propósitos relacionados antes, se requiere más de un millón de dólares. En el transporte las cifras de financiamiento necesarias no son pequeñas”.
El titular reconoció las limitaciones del Fondo como única fuente de divisas para solventar las carencias del sector, pero aseguró que su integración con otros programas gubernamentales impulsará “diferencias y mejorías en un sistema de transporte que mucho lo necesita”.
Entre los desafíos pendientes, mencionó la dependencia de financiamiento externo y la necesidad de optimizar la logística de distribución de insumos.