Los precios globales de los alimentos básicos se mantuvieron cerca de sus niveles más altos en más de dos años durante agosto, según informó este viernes la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
El índice de precios alimentarios de la FAO, que monitoriza mensualmente la evolución de una canasta de productos básicos comercializados internacionalmente, se situó en 130.1 puntos durante el octavo mes del año, prácticamente sin cambios respecto a los 130.0 puntos revisados de julio, pero registrando un incremento interanual del 6.9%.
Este nivel, informó Reuters, representa el valor más alto desde febrero de 2023, aunque se mantiene un 18.8% por debajo del pico histórico alcanzado en marzo de 2022, inmediatamente después de la invasión rusa de Ucrania.
El alza en los precios de la carne, el azúcar y especialmente los aceites vegetales compensó la caída registrada en los cereales y productos lácteos.
Los precios de los aceites vegetales aumentaron un 1.4% en agosto, alcanzando su nivel más alto en más de tres años. Este incremento fue impulsado principalmente por los aceites de palma, girasol y colza, afectados por los planes de Indonesia de aumentar su mandato de biodiésel. Solo el aceite de soja registró una caída ante las expectativas de una oferta abundante.
El índice de precios de la carne aumentó un 0.6%, alcanzando un máximo histórico impulsado por la fuerte demanda de carne de vacuno en Estados Unidos y China. Los precios de la carne de ovino también subieron, mientras los del porcino se mantuvieron estables y los de aves de corral disminuyeron debido a la abundante oferta de Brasil.
Caída en cereales y lácteos
Por quinto mes consecutivo, los precios de los cereales registraron una disminución, con una caída del 0.8% respecto a julio. Los precios del trigo descendieron ante las expectativas de grandes cosechas en la Unión Europea y Rusia, mientras el maíz experimentó una moderada alza impulsado por la mayor demanda estadounidense de piensos y etanol.
Los precios del arroz también bajaron, principalmente por la caída de los precios indios a mínimos de tres años, afectados por la debilidad de la rupia y la intensa competencia entre exportadores.
Los productos lácteos experimentaron una disminución del 1.3% en sus precios, con descensos en las cotizaciones de la mantequilla, el queso y la leche entera en polvo, en un contexto de escasa demanda de los mercados asiáticos.
Los precios del azúcar interrumpieron una racha de cinco meses de descensos al registrar un aumento del 0.2% en agosto. La preocupación por los rendimientos de la caña de azúcar en Brasil y la mayor demanda mundial contrarrestaron las mejoras en las perspectivas de cosechas en India y Tailandia.
En un informe complementario, la FAO pronosticó una producción mundial de cereales récord de 2 961 millones de toneladas métricas en 2025, superior a los 2 925 millones de toneladas de su estimación anterior. Este volumen representaría un incremento del 3.5% respecto al año anterior, debido principalmente a la mejora de las perspectivas del maíz.
Las previsiones de producción de maíz aumentaron para Estados Unidos, Brasil y México, impulsadas por rendimientos récord y una mayor superficie sembrada. En contraste, se prevé que la producción de la Unión Europea disminuya debido a condiciones climáticas secas y la reducción de rendimientos.
