La Comisión Agroalimentaria de la Asamblea Nacional del Poder Popular inició este lunes un debate urgente sobre la crítica situación de la ganadería cubana, con la presencia del vicepresidente Salvador Valdés Mesa, José Ramón Monteagudo (jefe del Departamento Agroalimentario del Comité Central) y Homero Acosta Álvarez, secretario del Consejo de Estado.
El informe preliminar reflejó que, pese a medidas diseñadas en años recientes, “muchas no han podido implementarse”, evidenciando un decrecimiento sostenido desde 2019 en producción de leche y carne. Esta tendencia se agrava en 2025 por el período lluvioso y persiste sin señales de recuperación.
El 84.5% del sector ganadero depende de productores individuales, seguido por empresas estatales (8.2%), UBPC (4.7%) y CPA (2.2%). Un núcleo de 23 386 productores (19% del total) concentra el 58% del ganado, con más de 429 000 vacas.
Tras un encuentro nacional con 100 productores presidido por el viceprimer ministro Jorge Luis Tapia, se prioriza:
- Enfoque en empresas estatales, proyectos genéticos y productores con +10 vacas.
- Destinar 95% de producción bovina a incentivos y solo 5% a abastecimiento municipal.
- Asignar parte de leche/carne a comercialización en divisa.
- Fortalecer acceso a insumos y mercados alternativos.
- Impulsar reproducción animal con venta de material genético en divisa.
- Implementar nuevo modelo de gestión bajo Decreto Ley 310 (vinculación productores-estatales).
El diputado Emilio Interián Rodríguez (Arroyo Naranjo) advirtió: “De mantenerse la tendencia, para 2030 la ganadería en Cuba podría desaparecer”.
Criticó los bajos precios estatales: “Si la industria paga 30 pesos por litro de leche y se vende en calle a 200, no hay incentivos”.
Víctor Manuel Montesinos Rodríguez (Contramaestre), también productor, señaló que “el 58% del ganado está en manos de productores con +10 vacas” y alertó sobre el robo de ganado: “De cada 100 casos, solo se aclaran uno o dos”.
Nidia Montes de Oca (San Nicolás de Bari) cuestionó la lentitud estatal: “Tenemos 63 medidas, pero nos falta coherencia en la gestión (…) La parte privada no tiene ese lío. Cuba está llena de comida en las ocho vías”.
Ydael Pérez Brito, ministro de Agricultura, admitió deficiencias en control, dirección y seguimiento que limitan el aprovechamiento de reservas productivas.
Sobre las medidas, explicó: “Deben mejorar el nivel de vida de los productores (…) Proponemos destinar parte de la leche a venta en moneda libremente convertible para adquirir insumos”. Reconoció errores en entrega de tierras: “Hemos parcelado mucho y dispersado la masa ganadera”.
Homero Acosta Álvarez, secretario del Consejo de Estado, sentenció: “Si no tomamos decisiones, la ganadería irá al mismo colapso que la industria azucarera”.
Destacó que el problema trasciende lo normativo: “Nada de lo discutido aquí se resuelve sin solucionar otros problemas macroeconómicos”. Relató un caso en Camagüey donde una cooperativa no entrega leche al Estado porque desde septiembre del año pasado no le pagan.