Los gobiernos de Gran Bretaña y Estados Unidos se encuentran en la fase final de implementación de un acuerdo comercial bilateral alcanzado en mayo, confirmó este lunes el primer ministro británico Keir Starmer durante la cumbre del G7 en Canadá.
Según Reuters, las declaraciones precedieron a su reunión con el presidente Donald Trump, donde abordarían los últimos detalles del pacto que cubre sectores estratégicos como acero, automóviles, etanol y carne de vacuno.
“Voy a ver al presidente Trump hoy y voy a hablar con él de nuestro acuerdo comercial”, declaró Starmer a medios en el marco del encuentro del Grupo de los Siete.
“Estoy muy contento de que hayamos hecho ese acuerdo comercial, y ahora estamos en las etapas finales de implementación, y espero que se complete muy pronto”.
Tres fuentes cercanas al proceso confirmaron que la Casa Blanca prepara una proclama presidencial para formalizar los términos negociados. Aunque el documento está listo para firma, las fuentes indicaron que no se confirmaba si Trump lo rubricaría durante el encuentro con Starmer ese mismo día.
El acuerdo, inicialmente negociado bajo el anterior gobierno conservador, implica concesiones mutuas: Estados Unidos eliminará aranceles del 25% sobre importaciones británicas de automóviles, aluminio y acero, mientras Gran Bretaña reducirá tarifas a productos estadounidenses como carne de vacuno y etanol.
La implementación enfrentó retrasos por ajustes técnicos, pero la proclama establecería una fecha efectiva en las próximas semanas según una fuente, evitando así que Londres enfrente aranceles de hasta 50% sobre metales a partir del 9 de julio.
El componente metalúrgico incluye requisitos específicos: Estados Unidos reducirá a cero los gravámenes a cambio de que Gran Bretaña acepte cuotas de exportación y garantías sobre el origen del acero.
Este mecanismo busca prevenir desvíos comerciales y proteger cadenas de suministro estratégicas. La urgencia por implementar el pacto refleja la presión del plazo límite del 9 de julio, cuando expira la exención arancelaria temporal otorgada a Londres.