Trabajadores de la Empresa de Fuentes Renovables de Energía (EMFRE) de Villa Clara, en colaboración con brigadas especializadas del sector de la construcción, impulsan la construcción del parque solar fotovoltaico en la comunidad de Bermejal, municipio de Santo Domingo, tras superar un retraso inicial de más de un mes causado por las características complejas del suelo.
El proyecto, ubicado en el kilómetro ocho de la carretera Santo Domingo-Corralillo, ha logrado instalar pilotes y bases para siete contenedores tecnológicos, infraestructura clave para el montaje de aproximadamente 1 570 estructuras de soporte (mesas) y 43 900 paneles solares. Esta instalación contribuirá a inyectar energía limpia al Sistema Electroenergético Nacional (SEN), reforzando la capacidad de generación renovable de la provincia, informó la Agencia Cubana de Noticias.
Alina Gallardo Almeida, inversionista de EMFRE, detalló que la alta concentración de arcilla y minerales ferrosos en el terreno obligó a utilizar pilotes especiales para asegurar la estabilidad de las estructuras. “Pese a las dificultades, el montaje de la tecnología prevista ya está en marcha, con el objetivo de alcanzar una potencia instalada de 21.8 megavatios en los momentos de mayor radiación solar”, afirmó.
El parque de Bermejal será el segundo de su tipo en Santo Domingo, siguiendo al de La Criolla, y forma parte de un plan estratégico para diversificar la matriz energética de Villa Clara y Cuba. Gallardo Almeida resaltó que la obra se ejecuta en terrenos antes infestados de marabú, lo que permite recuperar áreas subutilizadas y promover usos productivos del suelo.
Autoridades locales inspeccionaron recientemente el avance de la obra durante un recorrido por los 13 municipios de Villa Clara, donde evaluaron el impacto de proyectos de desarrollo sostenible en la región. La iniciativa, según Gallardo Almeida, alinea con los objetivos nacionales de incrementar la participación de energías renovables hasta un 37% para 2030, reduciendo la dependencia de combustibles fósiles.
Edelmiro Fonseca Quintana, residente en una comunidad aledaña, valoró el proyecto como un paso crucial para el territorio: “El desarrollo de las energías limpias en Cuba es fundamental para enfrentar las limitaciones que impone el bloqueo económico de los Estados Unidos al país, pues cada parque solar construido representa un paso más hacia la independencia energética y la soberanía nacional”.
Santo Domingo, ubicado a 340 kilómetros de La Habana en el norte villaclareño, tiene una densidad poblacional superior a 70 habitantes por kilómetro cuadrado, lo que subraya la necesidad de garantizar acceso estable a energía para sus comunidades. La obra, además de su impacto técnico, busca mejorar la calidad de vida local y servir como modelo replicable en otras zonas del país.