En la carretera que vincula a Guantánamo con Baracoa, a unos diez kilómetros del centro urbano, avanza la construcción del parque solar fotovoltaico El Algarrobo, una inversión estratégica que, una vez terminada, aportará 21,87 megawatts-hora de energía limpia al Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
Con una extensión de 32,24 hectáreas, esta obra forma parte del “Proyecto B”, un amplio programa de colaboración con la República Popular China dirigido a instalar mil mega watts de capacidad fotovoltaica en Cuba. Como el sitio número 37 de los 46 previstos en todo el país, El Algarrobo marcha hacia su puesta en marcha en un complejo contexto caracterizado por limitaciones energéticas y afectaciones climáticas que condicionan el ritmo constructivo, iniciado el pasado 24 de febrero.
La ingeniera Rafaela Sevillano Andrés, especialista principal del parque, explicó a la Agencia Cubana de Noticias los detalles técnicos de la instalación. “El parque está compuesto por siete inversores, cada uno con 234 mesas, para un total de 1 638, y en cada mesa se instalarán 26 paneles, lo que dará un total de 42 508 módulos solares” y aclaró: “El Algarrobo no incorpora acumulación de energía; durante su generación diurna aportará directamente al Sistema Eléctrico Nacional (SEN)”.
El esfuerzo constructivo es resultado del trabajo integrado de varias entidades. “Laboran actualmente la unidad 3 del Ministerio de la Construcción (MICONS) como ejecutora principal, de conjunto con topógrafos de la Empresa de Proyectos Agropecuarios (EMPA), perforadores de CUBIZA de Santiago de Cuba, especialistas de CEDAI en la confección de bases para luminarias y colegas de Granma. La participación será amplia y articulada a medida que avance la obra”, expresó Sevillano.
Un elemento distintivo del proyecto es la formación del capital humano que lo operará. “Nuestra parte inversionista —la Empresa Eléctrica Guantánamo— tiene una particularidad: sus trabajadores son los futuros operarios del parque, involucrados desde la construcción para fortalecer su sentido de pertenencia y su preparación técnica”, reveló la especialista.
Asiel Ruiz Zayas, operador de una perforadora-hincadora de CUBIZA, es uno de esos trabajadores capacitados. “Inicialmente recibimos cursos y capacitación para estos trabajos y con El Algarrobo suman seis parques en los que he trabajado, algunos en Bayamo, Niquero y Camagüey. Apoyar aquí es importante para nosotros, porque no solo estamos trabajando en una obra, estamos construyendo el futuro energético del país”, agregó.
El estado de avance se mide en dos frentes principales. “El avance de la obra civil —cimentaciones, cercado— está en un 67 por ciento. Pero el porcentaje general, que incluye el montaje de paneles y lo eléctrico, está en un 43.27 por ciento”, precisó Rafaela Sevillano. Este dato evidencia que, mientras la infraestructura de soporte avanza a buen ritmo, el montaje de la tecnología generadora aguarda su momento.
No obstante, el proceso ha enfrentado dificultades objetivas. “La obra se ve afectada por la poca disponibilidad de portadores energéticos —explicó Sevillano—, una situación que limita el ritmo de fundición de bases y atrasó algunas labores esenciales”.
Los ejecutores identifican como la fase más compleja la fundición de los piralotes, estructuras fundamentales para sostener las mesas de paneles solares. Del total de 16 544 piralotes previstos, solo se han fundido 3 578 hasta la fecha.
Osnaldo Coutín Téllez, responsable de la ejecución, señaló: “Las bases de los inversores están terminadas y tres equipos están colocados sobre ellas. Pero la fundición de los piralotes avanza lento por la mínima disponibilidad de electricidad y combustible. A ello se suma el impacto de las lluvias de septiembre a noviembre, que obligaron a detener varias jornadas debido al drenaje lento del terreno”.
A pesar de los obstáculos, se registran progresos en otras áreas: ya se construyeron todas las garitas de vigilancia y “se han abarcado 1 100 metros de 2 300 metros cercado perimetral —aseguró Coutín— las garitas están en uso por el personal de custodia para la seguridad del lugar y nos encontramos en la fase de terminación de las mismas, que incluye colocación de pisos, instalaciones eléctricas y puertas”.
Mileivis Díaz López, técnica de Izaje de CUBIZA, de la unidad empresarial de base de Santiago de Cuba, explicó que cuando las condiciones lo permiten, la productividad se eleva significativamente: “Hemos tenido atrasos por el déficit de combustible y por el suelo mojado que impide barrenar, pero cuando se puede trabajar los perforadores han llegado a hacer hasta 150 huecos en una jornada, triplicando la norma del equipo”, aseguró.
Impacto y proyección
El parque El Algarrobo se integrará a la generación solar que ya aporta Guantánamo, territorio donde más del 15 por ciento de la energía consumida proviene de fuentes renovables. La meta provincial es elevar ese aporte al 37 por ciento para el año 2030.
Para Yanisleidi Garbey Martinez, especialista de inversiones de la Empresa Eléctrica Guantánamo, el significado del proyecto trasciende lo local. “La sincronización de estos parques al SEN es crucial para el cambio de la matriz energética del país. Su aporte será decisivo no solo para la provincia, sino para toda la nación.
“La radiación solar es un recurso gratuito y abundante. Cada kilowatt generado sustituye importaciones de combustible y evita la emisión de gases contaminantes, a diferencia de las termoeléctricas”, resaltó Garbey Martínez sobre el beneficio ambiental y económico que representará la entrada en funcionamiento del parque solar fotovoltaico.
