El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el Fondo de Catar para el Desarrollo (QFFD) suscribieron un acuerdo de financiamiento por 4.5 millones de dólares destinado a mejorar el acceso a energía para cocción y promover un consumo de agua más seguro para 2.2 millones de personas en Cuba.
La iniciativa está dirigida a comunidades de las provincias de Artemisa, Mayabeque y La Habana, severamente afectadas por el paso de dos huracanes durante el año 2024.
El proyecto contempla la distribución de gas licuado de petróleo (GLP) como respuesta a la crítica situación energética que enfrenta la población. Los huracanes Oscar y Rafael, que impactaron el territorio nacional con menos de 30 días de diferencia, causaron graves daños a la infraestructura eléctrica, dejando a numerosas zonas sin servicio por períodos de hasta un mes.
Este déficit, agravado por la limitada disponibilidad de combustibles alternativos como el GLP, aumentó significativamente la vulnerabilidad de las familias para satisfacer necesidades básicas como la preparación de alimentos y el acceso al agua potable.
De acuerdo con el plan, los beneficiarios incluirán a 200 entidades de servicios públicos, con prioridad en centros de salud, instituciones educativas y centros de producción de alimentos. Asimismo, el apoyo fortalecerá los sistemas de atención familiar que tienen a su cargo la distribución de alimentos a personas con discapacidad, adultos mayores y otros grupos en situación de vulnerabilidad.
Al anunciar la contribución, el Sr. Fahad Hamad Al-Sulaiti, Director General del Fondo de Catar para el Desarrollo, declaró: “El Fondo de Qatar para el Desarrollo se compromete a apoyar a las comunidades afectadas por desastres naturales y crisis climáticas, garantizando que reciban los recursos esenciales necesarios para impulsar su recuperación. Esta alianza con el PNUD va más allá de abordar las necesidades inmediatas; se trata de permitir que las personas se reconstruyan con mayor fuerza y sienten las bases para una estabilidad a largo plazo. Al apoyar el acceso a la energía y a los servicios esenciales, buscamos ayudar a las comunidades no solo a recuperarse, sino también a adaptarse y prosperar ante los desafíos futuros”.
Por su parte, Fernando, Representante Residente del PNUD en Cuba, señaló: “Ampliar el acceso a la energía en Cuba es esencial para mejorar la vida de las personas y es una de las prioridades del PNUD en el país. Con esta contribución del Fondo de Catar para el Desarrollo, fortaleceremos la resiliencia de las comunidades y ampliaremos el acceso a servicios esenciales y al agua potable en las provincias de Artemisa, Mayabeque y La Habana”.
La ejecución del proyecto se llevará a cabo en colaboración con el Ministerio de Energía y Minas de Cuba, entidad que apoyará el proceso de distribución para garantizar que la asistencia llegue a las poblaciones afectadas. Esta intervención se enmarca en el compromiso compartido de ambas organizaciones internacionales con el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, específicamente en lo relacionado con el acceso a energía asequible y no contaminante (ODS 7) y el agua limpia y saneamiento (ODS 6).
El PNUD expresó su agradecimiento al Fondo de Catar para el Desarrollo por su apoyo continuo a los servicios vitales para las comunidades cubanas. Se prevé que la implementación del proyecto comience en los primeros meses del año 2026.
